¿Eres adicto al manicure? ¿Te da miedo que sin tu salón de belleza tus manos sean un desastre? Sabemos que ir al salón es un plus que tus uñas siempre agradecerán. Sin embargo, hacerte manicure no debería ser una cuestión de vida o muerte. Ni mucho menos un motivo para apanicar el día que no tenemos tiempo o presupuesto. Es un hecho que son nuestra carta de presentación y por eso hay que tratarlas como se merecen. Para que no te gane la prisa ni la cartera, aquí te van las reglas básicas-en nombre de la estética (y la salud)- para tener las uñas perfectas:
Lo más importante: ¡hidrata!
- Una de las cosas más importantes y que constantemente olvidamos es hidratar. La regla más repetitiva pero que ayuda sí o sí es tomar dos litros de agua diarios. Sí, también aplica para que las uñas se fortalezcan y no terminen por romperse.
- Mascarilla de aceite de oliva, sí leíste perfectamente. Y lo mejor es que esta es muy fácil de hacer, solo necesitas aceite de oliva (literal). El aceite de oliva consigue que las uñas se nutran por dentro y se regeneren. Lo único que tienes que hacer es sumergir las uñas (limpias y sin esmalte) a un recipiente con aceite de oliva durante 10 minutos. Después limpia con jabón normal y ponte crema hidratante.
- Cuando te apliques crema hidratante no olvides dejar a un lado las cutículas. También aprovecha para darte un masaje de manos, con estos aumentarás la absorción del producto.
- Aprovecha estos aceites que ayudan a hidratar (todavía más) las uñas: aceite de ricino, aceite de aguacate, aceite de almendra, aceite de germen de trigo, aceite de rosa mosqueta y aceite de karité.
Pon atención al cortar tus uñas
- Cuando cortes tus uñas deja que sobresalgan unos pocos milímetros para impedir que crezcan por dentro de la piel. Trata de usar cortauñas en vez de tijeras.
- Trata de seguir la forma de la cutícula que es la forma natural de las uñas.
- ¿Vas a limar? Procura que la lima esté ligeramente inclinada hacia arriba y deslizala siguiendo siempre la misma dirección. Trata de usar una lima de cartón y no de metal.
Cuando las pintes, pon atención a algunas cosas:
- Sabemos que tener las uñas pintadas hace toda la diferencia pero de vez en cuando es bueno dejarlas respirar para no maltratarlas en exceso.
- Usa esmaltes orgánicos o libres de sustancias tóxicas. Los esmaltes convencionales contienen ingredientes que pueden resultar tóxicos para tu salud como: tolueno, tosilamida, ftalato de dibutilo, alcanfor, formaldehído.
- Pon una capa transparente para evitar que la uña se debilite.
Y para despintarlas…
- Cuando uses quitaesmalte asegúrate que tenga propiedades hidratantes o endurecedoras.
- Usa quitaesmalte SIN acetona, de lo contrario pueden resultar muy agresivos para las uñas ya que resecan y debilitan. Los quitaesmaltes que no tienen acetona suelen incluir otros ingredientes como el limón. Puede que tardes más en quitar el color de tus uñas pero vale la pena.
¿Tienes las uñas amarillentas?
- Evita el cigarro. El tabaco hace que las uñas adquieran un color amarillento, al mismo tiempo que retrase el crecimiento normal de la cutícula.
- Blanquea al sumergirlas en jugo de limón o haz una pasta elaborada con limón, bicarbonato y aceite de lima.
Otros datos…
- Usa guantes cuando laves los platos. El contacto con la humedad y los jabones provoca que se deterioren y hasta corres el riesgo de que aparezcan hongos.
- Cuando te expongas al sol, usa protector solar para protegerlas de los rayos UV.
¿Ves? El salón de belleza no es el único modo de mantener tus uñas bonitas y saludables.
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