Yo lo llamo la montaña rusa, aquella sensación de la vida diaria, en donde puedo reír, llorar, entristecerme abruptamente o sentir una felicidad y energía que parece no tener fin. Otros lo llaman trastorno bipolar. En mi caso, fue detectado cuando tenía 18 años y hoy finalmente lo acepto.
Padezco trastorno bipolar 1, que se caracteriza por periodos de alteración en el estado de ánimo, ya sea maníaco, depresivo o mixto (es decir, alternando rápidamente entre manía y depresión). Estos estados de ánimo intensos a menudo conducen a problemas con el funcionamiento diario, afectación de relaciones personales y hasta ideas de suicidio. Sin embargo, también me han generado alegrías, sueños y pasiones en la vida que me mantienen arraigada a este mundo.
Inicialmente fue muy complicado aceptar que durante toda mi vida iba a padecer esta “enfermedad”, como muchos suelen llamarle. Sin embargo el trastorno bipolar no es una enfermedad si no una condición. Se etiqueta, se juzga, se oculta pero en mi caso vivo libre y abiertamente consiente de padecerla, pues no me ha evitado ser una mujer fuerte, trabajadora, en busca de sueños e independencia. Hablar sobre este tema es generalmente un tabú. Tampoco está bien visto ir a psiquiatras o a terapias, a pesar de que para mí son una autentica bendición de la que siempre estaré agradecida, al igual que a la red de apoyo que uno recibe a través de los años.
“Se etiqueta, se juzga, se oculta pero en mi caso vivo libre y abiertamente consiente de padecerla, pues no me ha evitado ser una mujer fuerte, trabajadora, en busca de sueños e independencia.”
La práctica de hábitos conduce al equilibrio; hay que respetar las horas de sueño, hacer ejercicio (que es fundamental), tomar las medicinas y nunca evitarlas, alimentarse bien, rodearse de gente que sume, evitar situaciones de riesgo, trabajar constantemente en el espíritu y en ser mejor persona día con día. Hay otras que a toda costa hay que evitar: prohibido el alcohol , ¡¡¡drogas ni de lejos!!! Quizá todo se defina en ser responsables de uno mismo, actuar y no quedarse esperando a que la vida te sea resuelta, o asumirte víctima porque cuando lo permites pierdes las riendas… Lo anterior invita a que quienes tenemos esta condición generemos consciencia, entendamos lo que pasa y reconozcamos cuando estamos o no estamos bien o cuando estamos entrando a un ciclo que ponga en peligro nuestra estabilidad emocional. En mi caso en especial, el apoyo de mi psiquiatra, Manuel Sánchez de Carmona, ha sido invaluable ya que me ha ayudado a conocer este padecimiento y a responder dentro de lo mejor de mis habilidades. Sin duda, le estaré eternamente agradecida.
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El manejo de los sentimientos a nuestro favor se vuelve indispensable día a día (este fue un gran consejo de una persona a la que le tengo especial cariño). Es indispensable canalizar todas mis energías a mis proyectos profesionales y personales. En mi vida profesional hoy abrazo mi pasión más grande, mi música. De hecho estoy incursionando en esta carrera tan difícil (como todo en la vida). Alíneo todos mis sentimientos a través de composiciones inspiradas en mi experiencia, las hago canción y las visto con música. Esta es mi manera de sanar. Sí, de esta forma saco mis alegrías, dolores, mi más profundo sentir y busco la forma de llegar al alma de las personas con mis letras. Los invito a todos a que escuchen y le pongan atención a mi último lanzamiento “Soy Supermán” en donde explico lo que siente una persona que padece de trastorno bipolar (disponible en Spotify, iTunes, YouTube y demás plataformas digitales).
“Busco construir en base al amor, al positivismo y a la constante lucha de ser una mujer independiente, entregada y que diga SÍ a la vida, SÍ a los problemas, SÍ a los sueños, SÍ a los retos, SÍ al simple hecho de agradecer el tener un espacio para SER y expresarme en esta tierra. Al pasado siempre lo dejo atrás.”
Yo solo sé que tengo el aquí y el ahora, que el futuro es incierto, que no sé que me traerá el mañana. Por ende busco construir en base al amor, al positivismo y a la constante lucha de ser una mujer independiente, entregada y que diga SÍ a la vida, SÍ a los problemas, SÍ a los sueños, SÍ a los retos, SÍ al simple hecho de agradecer el tener un espacio para SER y expresarme en esta tierra. Al pasado siempre lo dejo atrás.
Si alguien está interesado en hablar o entender más sobre el tema o tiene dudas, por favor mándenme un mail a rdeovando@gmail.com y con gusto platicamos. También los invito a que sigan mi carrera profesional, conozcan mi trabajo y mi proceso en mis redes sociales. Podrán escuchar canciones e historias que he construido a través de todos estos años de vida.
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