Cada dos años, en agosto, se instala en la plaza central de la capital belga un tapete de flores temático. Y esta vez, el protagonista en la famosísima Grand-Place (declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO) es nada más y nada menos que México. Y es que desde ayer, se instaló la alfombra floral inspirada en Guanajuato y es la primera vez que este evento hace referencia a una tradición latinoamericana. Te contamos todo lo que tienes que saber sobre el gran tapete mexicano hecho con miles de flores:
Sobre la tradición belga:
Instalar un tapete de flores temático es una tradición que empezó en 1971. El diseño se inspira en algún lugar o tradición del mundo y el resultado hace homenaje a un evento, país o continente. Cada año, un equipo de ilustradores, grafistas y paisajistas trabajan durante semanas para hacer un diseño floral de 1,800 metros cuadrados compuesto de begonias, dalias, gramíneas y madera. O sea, la alfombra mide 75 metros de longitud y 24 metros de ancho y se utilizan más de 500 mil flores. La instalación de la obra de arte (porque lo es) dura ocho horas aproximadamente y la realizan más de cien jardineros voluntarios de la organización Tapis des Fleurs.
*Dato curioso: Bélgica es el mayor productor de begonias en el mundo, cultivan 35 millones de flores de este tipo que equivale a un 80 por ciento de la producción total de todo el mundo.
México como protagonista
Como ya dijimos, esta edición está dedicada a México y en concreto a la tradición de la ciudad Uriangato en Guanajuato. Con el título “Guanajuato, joya cultural de México”, son tres culturas que tomaron como referencia para hacer el tapete. La otomí que ocupa la parte central del mosaico, así como la purépecha y la chupícuaro que están representadas en los laterales.
En México, estas tradiciones están plasmadas en la celebración de “La Octava noche” donde festejan al patrón de la ciudad guanajuatense. El 6 de octubre, los habitantes de Uriangato decoran sus calles con tapetes de alfombras de aserrín de colores. A estos los acompañan danzas típicas, candiles de ocotes, globos de cantoya y altares de flores.
Ahora, todas manifestaciones se han llevado al otro lado del charco y según explicó la diseñadora del manto de flores en Bruselas, Ana Rosa Aguilar, se trata de la primera vez que se permite poner en la alfombra un símbolo religioso. Es por eso, que San Miguel Arcángel (santo patrono de Bruselas y de Uriangato) se puede ver en las esquinas superiores de la obra.
La alfombra podrá contemplarse hasta el domingo 19 de agosto, así que si tienes la suerte de estar por allá, sí o sí, tienes que visitarla. Nosotros por acá, aplaudimos el trabajo y sobretodo el honor de que se celebre la cultura mexicana en todo el mundo.
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