¿Sabías que el color verde mejora la visión, relaja y alivia al cuerpo, y tiene efectos restaurativos en varias áreas de la vida?
Es el color de la vitalidad, el crecimiento, los nuevos principios y la abundancia. La personalidad del verde es protectora y empática. Tiene una cualidad emocionalmente positiva, que invita al balance y la armonía. Nos conecta con la habilidad de amar y nutrir, a nosotros mismos y a los demás. Es un pacificador natural, por lo que nos recuerda que la paz nada tiene que ver con la tendencia a volverse un mártir. Sácale jugo.
Como posee la vibración de la madre naturaleza, serena al sistema nervioso y ayuda a ver todos los lados de una situación.
PARA LA CASA, ES CONVENIENTE QUE LO UTILICES EN SUS DISTINTAS GAMAS
* En la sala promueve la relajación y, como es lo suficientemente cálido, la unidad.
* En las habitaciones ayuda al descanso y se dice que a la fertilidad.
* En la cocina enfría ambientes acalorados donde la prisa dificulta el disfrute.
* En los baños genera una sensación de tranquilidad y frescura.
EN LA VIDA COTIDIANA
* El humor negro se pinta de colores. Después de un periodo de 40 minutos observando la naturaleza, las emociones adquieren un tono positivo y el enojo se disipa en el viento.
* Las personas que laboran en oficinas verdes han mostrado sentirse más satisfechas y menos fatigadas.
* Los niños que viven en ambientes más verdes tienen mayor capacidad para poner atención, desarrollan mayor tolerancia a la frustración y son menos impulsivos.
* Los pacientes cuya ventana en un hospital permite apreciar los árboles de afuera han mostrado tener una recuperación más rápida y han reportado menos dolor.
Si no cuentas con paisajes naturales, ponte creativo, usa fotografías, cuadros y objetos de arte.
El verde es un color que observa, escucha, y contribuye al grupo. Promueve el amor a la familia, a los amigos, a las mascotas, y al hogar. Es el color del amante del jardín. Es generoso y confiable. Se relaciona con la estabilidad y la constancia , nos ayuda a ser persistentes y a lidiar con la adversidad.
“¡Verde que te quiero verde! Verde viento. Verdes ramas.” García Lorca